Capítulo 2 "No me lo creo"
Veia
en mi mano una especie de piedra negra con pequeños triangulos
grises, rápidamente supuse que se trataba del objeto misterioso, de
repente escuché un, "déjame ver eso", y una mano cogió
la piedra, y de nuevo un cambio de perspectiva, ya me estaba
acostumbrando a eso, volteé mi cabeza y ví a Miguel, el cual cuando
me devolvió la mirada se desmayó, no había que ser muy listo para
saber que había pasado, seguramente Miguel y Laura mientras
caminaban por la casa encontrarían la piedra y verían lo peculiar
que era, y no pudieron resistir la tentación de cogerla, al instante
me di cuenta de que estaba en el cuerpo de Laura, que no tenía un
cuerpo tan despanpanante como el de Ana, pero se sabe defender bien.
Yo quería volver al baño, así que me dirigí hacia allí cuando
por el camino me encontré a mi en el suelo hacíendome, una paja,
eso resolvió mi duda sobre que pasó con Ana.
Instintivamente
me lancé encima de mi cuerpo, y empecé a chuparle la polla, no
sabía porqué, pero se sentía bien, él dijo, "Pára Laura!,
soy Ana" pero no podía parar, mi cuerpo se movía por su cuenta
y después de eso, empecé a besarlo, nos estabamos liando, era una
sensación extraña pero satisfactoria al mismo tiempo, rápidamente
Ana me bajó los pantalones y las bragas y me empezó a comer el
coño, su lengua se movía de arriba a abajo, de dentro a fuera,
luego Ana me cogió y me metió mi pene por el coño, al principio
dolió, pero después ya todo fué un gran placer, me encantaba,
arriba y abajo, estaba pensando en ese momento que como sudaba tanto
me tocaría ducharme después, lo que desencadenaría otra lujuriosa
situación y eso me calentaba más, además para mi sorpresa, de
repente ví salir del baño el cuerpo desnudo y mojado de Ana, lo que
me calentó más todavía. Al final nos corrimos los dos mientras nos
miraba el cuerpo de Ana, me sentí pleno en ese momento, y notaba
como toda mi esencia se encontraba dentro del cuerpo de Laura, tan
caliente y placentera.
Los
dos estabamos tumbados en el suelo, medio desnudos mirándonos el uno
al otro, esa experiencia nos había echo olvidar por un segundo la
extraña situación en la que nos encontrabamos. Me empezó a rondar
por la cabeza un dilema moral, yo quería que ese estado perdurara
más tiempo, ya que desencadenaría más situaciones así, tenía que
pensar en la forma de deshacerme de la piedra sin tocarla o si la
tocaba que me dejara en una situación parecida, esto me hizo
recordar que el cuerpo desnudo de Ana acababa de salir del baño,y
pensé que era una buena oportunidad para probar un experimento. Me
quité los pantalones y salí corriendo hacia donde estaba ella, la
empujé hacia la ducha y la empezé a manosear y a sobar por todas
partes, ella no se resistió, así que también nos empezamos a liar.
De repente para mi desilusión una mano me cogió del hombro y me
apartó del cuerpo de Ana.
Cotinualo es muy buena historia
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